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domingo, 12 de noviembre de 2017

Crítica: película “Verónica”

Cuando la realidad supera a la ficción


PAULA OLVERA-El 25 de agosto se estrenó en cines “Verónica”, una película encuadrada dentro del género de terror clásico y suspense. Distribuida por Sony Pictures, la cinta narra la vida de una adolescente que es asediada por presencias sobrenaturales. Pero esta producción de Paco Plaza, autor de la saga “Rec”, es mucho más que eso. Hay que tener en cuenta que está basada en hechos reales, en el conocido como caso Vallecas. Por tanto, se relata una historia acontecida en Madrid durante la década de los noventa cuanto menos intrigante. Veamos las claves del éxito donde la joven Sandra Escacena ha debutado en el papel principal junto a sus hermanos en la gran pantalla Bruna González, Claudia Placer e Iván Chavero. Todos ellos muy bien acompañados por Ana Torrent.

Todavía con el miedo en el cuerpo tras la reciente fiesta de Halloween, los amantes del cine de terror deben tener muy presente el título “Verónica” que se estrenó a finales del mes de agosto. Está producción se ha basado libremente en el caso ocurrido en Vallecas, concretamente en la calle Luis Marín, en la década de los noventa del pasado siglo. Un suceso paranormal que llegó incluso a reconstruirse en el programa de Cuatro Cuarto Milenio.

Estefanía Gutiérrez Lázaro falleció en extrañas circunstancias en 1991. Previamente la joven había jugado a la ouija con unas amigas teniendo como objetivo contactar con el novio de una de ellas, que perdió la vida en un accidente de moto. Este mediático caso es por ahora el único registrado en España donde un inspector reconoce que ha sido testigo de elementos sobrenaturales. Y es que hay quien todavía hoy cree que esta chica fue poseída.

La apuesta cinematográfica tiene como protagonista a Verónica, una adolescente que está experimentando una situación límite: su progenitor ha fallecido y su madre no hace más que trabajar, tiene que sacar adelante a la chica y a sus otros tres hermanos. Este perfil dibuja una joven que realmente tiene miedo a crecer y que, sin embargo, se está viendo forzada a ello antes de tiempo. La falta de comunicación, la soledad, y el distanciamiento maternal marcan una trama centrada en la búsqueda de respuestas por parte de la estrella de la cinta.

Se trata de una película en la que predominan los papeles femeninos, eliminando de la ecuación prácticamente a los personajes masculinos. Y es que se cuenta la historia de Verónica a través de sus propios ojos. Sandra Escacena debuta en este papel protagonista transmitiendo a la perfección ese momento de vértigo que todos hemos sentido cuando nuestro cuerpo comienza a cambiar y despertamos a la sexualidad, en definitiva, a la vida adulta, donde los problemas de los pequeños nos parecen pura nimiedad.

La presencia de Ana Torrent ha sido clave en el éxito de esta película. La actriz lleva en la profesión desde que tiene uso de razón y seguro que durante el rodaje le invadió la nostalgia al comparar a los niños protagonistas con ella misma durante su infancia. De hecho, más de un espectador se habrá dado cuenta de que se conecta con su universo infantil y se hace un homenaje indirectamente a la película “Cría cuervos”.

Hay que recordar además que habían pasado cinco años desde el último largometraje del director Paco Plaza, por lo que se puede decir que con “Verónica” comienza una nueva etapa donde deja aparcada la trilogía que le dio parte de su fama. Desde luego, su trabajo en esta nueva producción es exquisito, se percibe que es una de sus cintas más personales, un volver a empezar repleto de pasión.

 “Verónica” se convierte en mi recomendación de esta semana porque difiere bastante de otros títulos centrados en posesiones y/o casas poseídas. Y es que no se trata de una película de terror al uso, los espectadores pegarán algún que otro grito o bote del asiento en ocasiones puntuales, aquí lo que interesa primeramente es presentar a la protagonista en un entorno real.

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